ARTE ROMÁNICO

El románico fue un estilo artístico que se extiende sobre todo en Europa durante los siglos XI, XII y parte del XIII (se establece una separación entre la iglesia ortodoxa y la católica)

Aunque es un arte internacional, inicialmente, debe considerarse de origen "francés”.  A España llega por el Camino de Santiago y, rápidamente, adquiere características propias.

Este estilo artístico es una forma de lenguaje específica de las manifestaciones artísticas que se habían ido utilizando en la Edad Media (época feudal).
No fue producto de una sola nacionalidad o región  también surgió en Italia y Alemania aparte de Francia y España. En cada uno de estos países se desarrolló con características propias pero similares entre ellas como para ser considerado el primer estilo internacional, con un ámbito europeo, ya que el románico surge como “arte de la cristiandad europea” reunida en torno al Papa de Roma, y sus intenciones no son otras que la educación religiosa fomentando la introspección del individuo, y concienciando al pueblo y a los peregrinos con la representación de un Dios severo y estricto, pero redentor.

En Francia encontramos el Monasterio de Cluny en Borgoña. Las características de Normandía influyeron más en Inglaterra, son más simples y sencillas y apenas tienen decoración externa, como en la iglesia de Caen. Y en Provenza las construcciones eran muy simples como en San Trófimo de Arles. Desde Loira hasta Garona se distingue la Catedral de Angulema.

El Románico llegó a España por el noreste peninsular. Es en los Condados Catalanes donde nos vamos a encontrar las mayores influencias del románico. Dentro de Cataluña va a haber diferenciación de estilos: franco mudéjar o franco musulmana, en una primera etapa, más hacia la zona de Girona. En una segunda etapa, se verán ciertas influencias de maestros italianos, como por ejemplo Santa María de Ripoll o La Seu d´Urgell. El último florecimiento del románico catalán tuvo lugar en los núcleos de Lérida y Tarragona. Ya en el Reino de Aragón y Navarra se expanden por pequeños territorios en los Pirineos con gran variedad de edificios y continúan por Castilla y Galicia siendo un ícono en este último lugar la Catedral de Santiago de Compostela. Estas construcciones, la mayor parte iglesias y monasterios, se construían en zonas rurales y acababan siendo el núcleo de la población; van adquiriendo una gran importancia debido tanto a su valor espiritual como a su valor terrenal, ya que se crea riqueza en torno a ellas. Las iglesias, sobre todo, se fueron construyendo en torno al Camino de Santiago. Los peregrinos buscaban en éstas un lugar de meditación y aprendizaje. Se dice que con los deambulatorios se crea el arte de los caminos o el arte de los peregrinos.

Extensión del Románico.

Características:

-Arco de medio punto: es un arco que tiene forma de medio círculo.

-Bóveda de cañón: prolongación de un arco de medio punto a lo largo de un eje longitudinal.

-Predominan los muros y los vanos dando lugar a un interior oscuro.

-Crucero: en una iglesia de planta de cruz, zona de intersección entre la nave principal y otra transversal a ella.

-Nave: pasillo principal que va de la puerta al crucero.

-Cimborrio: es la torre del crucero y se eleva de forma hexagonal o sexagonal.

-Torre: destinada a colocar la campana con la finalidad de convocar a los fieles, y en caso de ausencia de campana, punto alto de referencia para los peregrinos.

-Ábside: es la parte de la Iglesia situada en la cabecera, generalmente semicircular.

-Girola (también llamado deambulatorio): el espacio que rodea al ábside.

-En las fachadas encontramos el pórtico, que está compuesto por arquivoltas, jambas con capiteles (elemento arquitectónico que se dispone en lo alto de una columna) y lo más importante, el tímpano que representa casi siempre a Dios Padre y Dios Hijo (Pantocrátor) iconografiados en la Mandorla (nuez central del tímpano). Vemos también galerías con arcos ciegos (no hay paso).

-Contrafuerte: es un engrosamiento de un muro hacia el exterior para hacer fuerza en la construcción y evitar derrumbes o movimientos.

-Canecillos: son esculturas que encontramos en los bajo techos y en el pórtico, sobre todo en las arquivoltas y capiteles, y es uno de los puntos más importantes del arte Románico ya que narran escenas sagradas del Antiguo y Nuevo Testamento o la vida y milagros de mártires y santos con la intención de adoctrinar al pueblo.

-Cruz: la encontramos en lo alto de la torre y se trata de una cruz latina.

Se sabe que alrededor de los monasterios se trabajaban las tierras  pertenecientes a la orden y la vida se organizaba en torno a ellos.  Algunas construcciones eran castillos que a su vez protegían a los habitantes de alrededor. Eran obras pensadas para proteger de posibles ataques a la población y servían también como faros, refugios o centros de reunión y caridad y hogares de sepultura para reyes y reinas. Grandes murallas y muros los resguardaban.

Tanto iglesias como monasterios terminaban en forma de aguja dando la impresión de alzarse al cielo y sus bóvedas interiores tenían “salas celestiales” que recordaban el más allá, la fe y los destinos propios.

Se dice que el arte Románico perduró en el tiempo debido a los ritmos lentos de las sociedades antiguas. Este estilo artístico tuvo tanta aceptación entre sus fieles que las comunidades ciudadanas sucesivas no consideraron necesario construir tantas iglesias de otros estilos ya que las Románicas funcionaban perfectamente, gracias a la concentración de sus habitantes.

El sucesor del arte Románico fue el arte Gótico (mediados s. XII hasta siglo XV), pero su transición no fue brusca sino evolutiva, encontrando incluso iglesias y catedrales con ambos estilos.